COLITIS ULCEROSA
La colitis ulcerosa es una enfermedad inflamatoria del colon (el intestino grueso). Está caracterizada por la inflamación y ulceración de la pared interior del colon, provoca una inflamación duradera y úlceras (llagas) en el tubo digestivo. La colitis ulcerosa afecta el revestimiento más profundo del intestino grueso (colon) y del recto. Por lo general, los síntomas no aparecen repentinamente, sino que lo hacen con el paso del tiempo.
Los síntomas típicos incluyen diarrea (algunas veces con sangre) y con frecuencia dolor abdominal. Cuando la colitis ulcerosa afecta solamente la parte inferior del colon, el recto, se llama proctitis ulcerosa. Si la enfermedad afecta solamente el lado izquierdo del colon, es llamada colitis limitada o distal. Si involucra el colon completo, es llamada pancolitis. La colitis ulcerosa difiere de otra enfermedad intestinal inflamatoria E.I.I, la enfermedad de Crohn. La enfermedad de Crohn puede afectar cualquier área del tracto gastrointestinal, incluyendo el intestino delgado. La colitis ulcerosa afecta solamente el colon. La inflamación involucra el recto en su totalidad y se extiende hasta el colon de una manera continua. No existen áreas de intestino normal entre las áreas de intestino enfermo. En contraste, estas llamadas áreas “saltadas” pueden ocurrir en la enfermedad de Crohn. La colitis ulcerosa afecta solamente el tejido más interno que cubre el colon, mientras que la enfermedad de Crohn puede afectar el espesor completo de la pared intestinal. La colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn son diferentes del síndrome de intestino irritable.
La colitis ulcerosa es predominantemente una enfermedad de jóvenes. La mayoría de los casos es diagnosticado antes de los 30 años, aunque la enfermedad puede ocurrir a cualquier edad, incluyendo en las últimas décadas de la vida de una persona. En efecto, es posible que un número mucho menor de pacientes se vea afectado por la enfermedad entre los 50 y los 70 años de edad. Existe mayor incidencia de colitis ulcerosa en las personas caucásicas que en grupos minoritarios y una mayor incidencia en personas de raza judía que en los no judíos.
Sabemos que la colitis ulcerosa tiende a ocurrir en familias. Estudios han demostrado que hasta un 20% de los pacientes con colitis ulcerosa tendrán un familiar cercano con colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn. Muy frecuentemente el familiar afectado del paciente de colitis ulcerosa también tendrá colitis ulcerosa. Sin embargo, en base a las investigaciones recientes, no parece haber un patrón claro de herencia por ahora. Los investigadores continúan buscando genes específicos involucrados en la causa de las enfermedades. Al presente, sin embargo, no hay manera de predecir cuál, si alguno, de los miembros de la familia desarrollará colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
La colitis ulcerosa puede ser debilitante y, algunas veces, provocar complicaciones que pueden poner en riesgo la vida. A pesar de que no se conoce la cura, el tratamiento puede reducir en gran medida los signos y síntomas de la enfermedad e, incluso, provocar una remisión de largo plazo.
Debido a que el cuerpo y la mente están muy interrelacionados, el estrés emocional puede influir en los síntomas de la colitis ulcerosa o, para el caso, cualquier enfermedad crónica. Aunque la enfermedad ocasionalmente recurre después de que el paciente ha experimentado problemas emocionales, no existe prueba que el estrés cause colitis ulcerosa. Es mucho más probable que la angustia emocional que los pacientes algunas veces sienten es una reacción a los síntomas de la misma enfermedad. Por lo tanto, las personas con colitis ulcerosa deberán recibir comprensión y apoyo emocional de sus familias y médicos. CCFA ofrece grupos locales de apoyo mutuo para ayudar a los pacientes y sus familias a hacer frente a la colitis ulcerosa y a la enfermedad de Crohn.
Síntomas
Los síntomas de la colitis ulcerosa pueden variar, según la gravedad de la inflamación y la región donde aparezcan. Algunos de los signos y síntomas son:
- Diarrea, que suele tener sangre o pus
- Dolor y cólicos abdominales
- Dolor en el recto
- Sangrado rectal (evacuar heces con una pequeña cantidad de sangre)
- Necesidad urgente de defecar
- Incapacidad para defecar a pesar de la urgencia
- Adelgazamiento
- Fatiga
- Fiebre
- En el caso de los niños, problemas de crecimiento
La mayoría de las personas que sufren colitis ulcerosa presentan síntomas leves a moderados. El avance de la colitis ulcerosa puede variar, y algunas personas pueden tener largos períodos de remisión.
Tipos
Los médicos suelen clasificar la colitis ulcerosa según dónde se presente. Los tipos de colitis ulcerosa son:
- Proctitis ulcerosa.La inflamación se limita a la zona más cercana al ano (recto), y el sangrado rectal puede ser el único signo de la enfermedad. Esta forma de colitis ulcerosa suele ser la más leve.
- La inflamación afecta el recto y el colon sigmoide (extremo inferior del colon). Los signos y síntomas son diarrea con sangre, dolor y calambres abdominales, así como la incapacidad de defecar a pesar de la necesidad de hacerlo (tenesmo).
- Colitis izquierda.La inflamación se extiende desde el recto hasta el colon sigmoide y el colon descendiente. Los signos y síntomas pueden ser diarrea con sangre, dolor y calambres abdominales del lado izquierdo, así como adelgazamiento involuntario.
- Por lo general, la pancolitis afecta todo el colon y causa episodios de diarrea con sangre, que pueden ser graves, dolor y calambres abdominales, fatiga y adelgazamiento significativo.
- Colitis ulcerosa aguda grave. Esta forma poco frecuente afecta todo el colon y provoca dolor intenso, diarrea intensa, sangrado, fiebre e imposibilidad de comer.
Cuándo consultar al médico
Consulta con tu médico si presentas un cambio persistente en tus hábitos intestinales o si tienes signos y síntomas como los siguientes:
- Dolor abdominal
- Sangre en las heces
- Diarrea persistente que no responde a los medicamentos de venta libre
- Diarrea que te despierta a la noche
- Fiebre sin causa aparente que dura más de uno o dos días
A pesar de que la colitis ulcerosa generalmente no es mortal, es una enfermedad grave que, en algunos casos, puede causar complicaciones que pueden poner en riesgo la vida.
Los médicos diagnostican la colitis ulcerosa basados en la historia clínica del paciente como se describe anteriormente. La principal meta de los exámenes médicos es diferenciar la colitis ulcerosa de otras causas infecciosas de diarrea. En consecuencia, se realizan exámenes de excremento para eliminar la posibilidad de diarrea causada por bacteria, virus y parásitos. A continuación, el paciente generalmente se somete a una evaluación del colon, usando uno de dos exámenes. Para hacer la sigmoidoscopía, el doctor introduce un instrumento flexible en el recto y el colon bajo. Este examen le permite al doctor visualizar la extensión y el grado de inflamación en estas áreas. Una colonoscopía total, es un examen similar, que permite la visualización del colon completo. Utilizando estas técnicas, el médico puede determinar la categoria de la enfermedad, ya sea proctitis ulcerosa, colitis limitada o pancolitis. El médico puede tomar muestras del tejido interno que cubre el colon, llamadas biopsias y enviarlas al patólogo para un estudio adicional. La colitis ulcerosa puede entonces distinguirse de otras enfermedades del colon que causan sangrado rectal, incluyendo la enfermedad de Crohn en el colon, diverticulitis y cáncer.
Causas
Los investigadores desconocen la causa de esta enfermedad. No se cree que sea causada por estrés emocional o por alimentos, o que sea transmitida directamente de persona a persona. Los estudios de investigación han indicado que la inflamación en los casos de enfermedad inflamatoria intestinal involucra una interacción compleja entre los genes heredados por el paciente, su sistema inmunológico y algunos elementos del medio ambiente.Sustancias extrañas (antígenos) en el ambiente pueden ser la causa directa de la inflamación, o pueden estimular las defensas del cuerpo para producir inflamación que continua sin control. Los investigadores creen que una vez que el sistema inmunológico del paciente con E.I.I. es “detonado”, no sabe como “apagarse” adecuadamente en el tiempo correcto. Como resultado, la inflamación daña el intestino y causa los síntomas de E.I.I.. Es por esto que la meta principal de la terapia médica es ayudar a los pacientes a regular mejor su sistema inmunológico. La CCFA continua patrocinando la investigación para determinar las causas de esta misteriosa enfermedad. Muchos de estos estudios han sido llevados a cabo en los campos de inmunología, el estudio del sistema de defensa del cuerpo; microbiología, el estudio de los organismos microscópicos con poder suficiente para causar enfermedad; y genética. Muchos científicos ahora creen que la interacción de un agente externo (tal como un virus o bacteria) con el sistema inmunológico del cuerpo puede detonar la enfermedad o que dicho agente puede causar daño a la pared intestinal, iniciando o acelerando el proceso de la enfermedad. A través de nuestros esfuerzos de investigación, se aprenderá mucho más de la enfermedad y esto llevará a encontrar mejores tratamientos, prevención y, finalmente, una cura.
Factores de riesgo
La colitis ulcerosa afecta aproximadamente a la misma cantidad de mujeres de que hombres. Los factores de riesgo pueden ser:
- La colitis ulcerosa generalmente comienza antes de los 30 años. Sin embargo, puede aparecer a cualquier edad, y algunas personas podrían no padecer la enfermedad hasta después de los 60 años.
- Raza u origen étnico.Aunque las personas blancas tienen un mayor riesgo de padecer la enfermedad, cualquier raza puede presentarla. Si tienes ascendencia judía askenazí, el riesgo es incluso mayor.
- Antecedentes familiares.Corres un mayor riesgo si tienes un pariente cercano, como un padre, hermanos o hijos, con esta enfermedad.
Complicaciones
Algunas posibles complicaciones de la colitis ulcerosa son:
- Sangrado intenso
- Un orificio en el colon (perforación del colon)
- Deshidratación grave
- Enfermedad hepática (poco frecuente)
- Disminución de la masa ósea (osteoporosis)
- Inflamación de la piel, las articulaciones y los ojos
- Mayor riesgo de padecer cáncer de colon
- Rápida inflamación del colon (megacolon tóxico)
- Mayor riesgo de coágulos sanguíneos en venas y arterias
Tratamiento
Actualmente, no existe cura médica para la colitis ulcerosa, pero un tratamiento médico efectivo puede suprimir el proceso inflamatorio. Esto permite al colon sanar y aliviar los síntomas de diarrea, sangrado rectal y dolor abdominal. Como tal, el tratamiento de la colitis ulcerosa involucra medicamentos que disminuyen la inflamación anormal en la pared del colon y de ese modo controlan los síntomas.
Entre una cuarta, a una tercera parte de pacientes, la terapia médica no es completamente exitosa o surgen complicaciones. Bajo estas circunstancias, puede considerarse la cirugía. Esta cirugía involucra la extirpación completa del colon (colectomía). A diferencia de la enfermedad de Crohn la cual puede recurrir después de la cirugía, la colitis ulcerosa es “curada” una vez que se extirpa el colon. Dependiendo de un número de factores, incluyendo la extensión de la enfermedad y la edad del paciente y su estado de salud general, se puede recomendar una de dos operaciones. La primera involucra la extirpación total del colon y recto, con la creación de una ileostomía o estoma externa (una abertura en el abdomen a través de la cual los desechos son vaciados en una bolsa, la cual esta adherida a la piel con adhesivos). Muchas personas en la actualidad pueden aprovechar nuevas técnicas quirúrgicas, que han sido desarrolladas para remover el colon, mantener la continuidad del intestino y la continencia y evitar una ileostomía. Estas técnicas involucran la creación de una bolsa interna en el intestino delgado y adherirla al músculo del esfínter anal, manteniendo así la integridad intestinal y eliminando la necesidad de un dispositivo externo.